Hace varios años que nos encontramos en un país que no solo está dividido, sino que se encuentra enfrentado, donde se busca la confrontación y no el consenso, y eso se ha trasladado a nuestro querido pueblo, donde se disputan intereses sectoriales y no se busca un objetivo común como sociedad.
Somos conscientes de que se pueden tener ideas o creencias distintas, hasta quizás opuestas, las cuales podemos no compartir, pero sí, deben ser respetadas. Los eventos acontecidos demuestran la intolerancia que existe a la hora de aceptar las posturas diferentes y ese camino nos está llevando a una espiral de violencia que se expone día tras día en todo el territorio nacional.
Ciertas manifestaciones, proclamas y posturas inflexibles han provocado un clima social que desemboca en actos violentos perpetrados por sectores con intereses concretos, originando una deslegitimación de los reclamos e imponiendo la ley del más fuerte, por sobre la razón, el respeto y la tolerancia.
Por eso creemos que es un momento importante para llamar a la reflexión y solicitar un diálogo abierto entre autoridades nacionales, provinciales y municipales, partidos políticos, instituciones intermedias y la comunidad en su conjunto, avalado con hechos concretos y reales, para tender puentes que nos lleven a un entendimiento y a una mayor tolerancia con los que piensan o creen distinto.
Villa La Angostura, Argentina y el mundo entero viven con la suma de individuos, los cuales tienen sus costumbres, sus creencias y su religión. Nosotros pensamos que esa unión nos fortalece, nos hace crecer, nos hace mejores siempre y cuando tiremos todos del mismo carro en la misma dirección.
